Dieta: un factor clave para controlar el azúcar en sangre
Cuando desee beneficiarse de una entrada óptima de azúcar en las células y así disfrutar de una energía estable durante todo el día, debe fijarse en el índice glucémico (IG) de los alimentos. Esto evita pasar por una fase de hipoglucemia seguida inevitablemente de hiperglucemia y luego hipoglucemia nuevamente. Los azúcares de nuestros alimentos pasan más o menos rápidamente a través de la pared intestinal para fluir hacia la sangre y luego hacia las células donde ingresan para ser quemados o almacenados. Es el índice glucémico (IG) el que mide esta tasa.
Un alimento con IG bajo o moderado es beneficioso porque ayuda a controlar el azúcar en sangre (= nivel de azúcar en sangre). Un alimento con IG alto agota la insulina producida por el páncreas (= hormona que empuja el azúcar hacia la célula y reduce los niveles de azúcar en sangre) y promueve los "antojos" y el aumento de peso al almacenar azúcar sin quemar.
A título indicativo, se considera que:
- IG bajo: entre 0 y 55
- IG moderado o medio: entre 56 y 69
- IG alto: entre 70 y 100
